Cómo Empezó Todo
Todo comenzó en una pequeña oficina de Santa Cruz de Tenerife cuando me di cuenta de que los métodos de valoración que enseñaban en las universidades no coincidían con lo que realmente necesitaban los analistas en el día a día.
Después de años trabajando con empresas locales y viendo las mismas dificultades una y otra vez, decidí crear algo diferente. No queríamos ser otra academia más que repite fórmulas del libro de texto.
Queríamos enseñar valoración como realmente se hace: con casos reales, con datos imperfectos, y con las limitaciones que todos enfrentamos cuando trabajamos con empresas españolas.